Hoy nos levantábamos pronto para coger el tren a las 8:44 a Kamakura.

Nos bajamos en la parada de Kita-Kamakura, ya que hay varios templos que se pueden ver entre esta estación y la siguiente, la de Kamakura.

Encontramos un mapa en la estación con los templos de la zona. Nosotros veremos sólo 3, pero la verdad es que se puede emplear mucho más tiempo y visitar más, porque de verdad creo que merecen la pena.


(Podéis ampliar la imagen si la abrís en una pestaña nueva)

Templo de Engakuji




El templo de Engakuji (300 yenes la entrada) fue fundado en 1282. Ha sufrido varios incendios. Durante el periodo Meiji, muchos novicios zen empezaron a venir al templo a practicar meditación zen, convirtiendo así a este templo en el punto de encuentro del zen de toda esta región.



A día de hoy aún hay sesiones de meditación, cursos de verano, etc... y muchos lo conocen como "el templo del espíritu".



Tiene varios pabellones, el principal de ellos el Butsuden, que se derrumbó en el gran terremoto de 1964 y tuvieron que reconstruirlo entero.

El sanmon es la puerta principal, con estatuas de Kannon y de los 16 Lakas.



Hay pabellones de meditación, salas para sermones y sesiones de meditación, y jardines zen (como no podía ser de otra manera), en los que pasar un agradable rato.



La siguiente parada, a 20 minutos caminando bajo un sol abrasador, mucha humedad, y con un paraguas semiroto, fue el templo de Kencho-ji.


Templo de Kenchoji



De los cinco grandes templos zen de Kamakura, este es el más importante, y además es el más antiguo de todo Japón. Se terminó de construir en 1253, durante el periodo Kencho, de donde toma el nombre.


Nos os preocupéis que a la entrada os dan un mapa en español

El fundador es un maestro chino zen, que vino a Japón a enseñar zen, y tras varios años por el país vino a Kamakura a fundar este templo.

Kenchoji originalmente estuvo compuesto de siete edificios principales y 49 pequeños templos, pero, adivinidad: varios incendios entre los siglos 14 y 15 los destruyeron. Ahora hay 10 templos pequeños y varios edificios principales.



Lo primero que nos encontramos nada más entrar en el templo (otros 300 yenes) es la puerta principal, de madera, muy amplio, y con bancos a su sombra donde poder pararnos a comer algo de fruta para reponer fuerzas.

El bonsho es un pequeño templete donde se encuentra una gran campana, de 1255, designada tesoro nacional por el gobierno de Japón.

El butsuden y el karamon fueron originalmente mausoleos, y se encontraban en el templo Zojoji de Tokyo. Los trajeron pieza a pieza a este templo en 1647.



El Hatto es donde se realizan las ceremonias públicas. Es la estructura de madera más grande de Japón... budista y de la zona este. (¿Por qué les gusta tanto competir por ser "el más grande"?).



Hay jardines, altares, y una imagen de un buda en ayuno en el hall principal. Y un monasterio cerrado al público, donde los monjes se forman en meditación zen.

Siguiente parada, esta más cerca pero tras una gran escalinata:


Tsurugaoka Hachimangu



Este templo es sintoísta, el más importante de Kamakura. Entramos por un acceso lateral que nos llevó al pabellón principal.



Esto ya empezaba a parecer de nuevo la romería japonesa: entre devotos y turistas estaba a rebosar el templo.

El acceso principal se realiza por una amplia avenida repleta de cerezos y con varios toris.



Esta avenida lleva directa a la estación de trenes de Kamakura, donde se puede coger el tranvía que lleva a.... otro templo, que luego cuento :D.

En lugar de pasear por esta avenida, se puede caminar por la paralela, Komachi Street, donde hay muchas tiendas enfocadas al turismo y varios restaurantes.



Nosotros elegimos uno con pinta de restaurante chino donde comimos bastante bien y bastante barato para lo que había alrededor (1475 yenes dos personas). Aun así, que sepáis que al terminar esa calle hay un McDonalds.

En esa plaza, la del McDonalds, hay una parada de autobuses en la que cogimos un bus con un cartel que ponía "Daibutsuden". Pregunté por si acaso, y por 200 yenes cada uno, subimos al bus, que nos dejó en la puerta de..


Kotuku-in



Este es un templo (200 yenes la entrada) budista, cuyo mayor atractivo es la enorme figura de bronce del buda Amida, que es (otra vez el dato), la segunda más grande de Japón tras la de Nara.



¿Es grande? Sí. ¿Merece la pena? Sí. ¿Es lo que más me ha gustado de Kamakura? No.

Venir a Kamakura sin ver los templos de la zona de Kita Kamakura me parece un viaje en balde. Pero para gustos los colores.



Para regresar a la estación de tren de Kamakura esta vez cogimos un tranvía (a 10 minutos andando del templo...claramente merece más la pena el bus), por 190 yenes cada uno.



Nos quedamos con ganas de más, pero queríamos llegar a nuestro siguiente destino, que leeréis en el siguiente post :)

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