Martes, 18 de agosto de 2015: Ninh Binh

Después de desayunar bajamos a la recepción del hotel a que nos cuenten los servicios que ofrecen de agencia de viajes. Anoche hicieron un intento pero aún estábamos con el susto cucarachil en el cuerpo, así que les dijimos que mejor hoy. 

Al final contratamos dos motos con conductor y las entradas a todos los sitios por 520.000 dongs por persona. 

Salimos en dirección Trang An (que se pronuncia Chan an). Mola la moto. 

Tras un breve recorrido callejeando por Ninh Binh y alrededores, llegamos al embarcadero.

Lo tienen preparadísimo todo, de hecho no te dan tickets de entradas, sino tarjetas de plástico que has de acercar a unos tornos para acceder a la zona de embarque. Tienen una gran zona cubierta con puestos de comida, y bueno, cientos de barcas. Pongo una foto que hice a un cuadro para que se vea lo que es la zona.


En la barca no puedes ir solo, parece ser que si no hay mínimo cuatro personas, la barquera no rema.

A nosotros nos toca con dos extranjeros occidentales, yo creo que del norte de Europa.

Vamos solos eso sí, no se oye más que el remar.

Y el paisaje es una gozada. Posiblemente uno de los paisajes más bonitos que he visto en mi vida.


Una de las cosas que me sorprenden es lo de atravesar todas esas montañas por debajo, por las cuevas.

En total son nueve cuevas las que pasamos, y cada una me gustaba más que la anterior.


Algunas tienen el techo muy bajo, casi te das en la cabeza... la barquera, para avisarnos de ello, gritaba "cucú! cucú!".

Tras dos horas de paseo regresamos a tierra firme. Se ha ganado una propina de 20mil dongs (y además no la ha pedido siquiera).

Luego vamos a Hoa Lu, la primera capital vietnamita en la que vivieron tres reyes: Din, Li y Le. Además Din y Le (o Li, les confundo) fueron dos reyes casados con la misma reina.


La antigua capital es realmente una especie de pequeño templo y no da pa mucho. Pero bueno. Damos un paseo y de ahí vamos a comer.


Comemos y nos vamos a la pagoda de Bai Dihn. Parecía prometedora (la más grande del sudeste asiático!), pero además de ser de nueva construcción, no está acabada, y el calor es horrible. A 38 grados nos comentan que estamos.


Recorremos un 60% y nos damos la vuelta. 500 escalones de subida y los mismos de bajada sin nada que ver y haciendo la digestión no tiene sentido.


De ahí al hotel. Reponemos y nos vamos a buscar un supermercado. Compramos y negociamos la excursión para mañana: 430mil pero en lugar de Tam Coc nos lleva a otro sitio menos turístico y más barato.

A las 22 se va la luz de la habitación. No nos importa estar a oscuras... pero no hay aire acondicionado y el calor es horrible. Suerte que a la media hora vuelve. Ha sido un apagón general en casi toda la ciudad.